Esta mañana, el metal amarillo ha subido un 0,9%, o 16,25 dólares. En el momento de redactar este informe, el metal amarillo se cotizaba a 1.815,9 dólares, mientras que la sesión de ayer en el Comex de Nueva York terminó por debajo del umbral clave de los 1.800 dólares.

El lingote cerró el miércoles con un ligero descenso y continuó así la serie de fracasos iniciada la semana pasada. El activo perdió un 0,01%, es decir, 1,2 dólares. El precio bajó a 1.799,70 dólares. Es la tercera vez que el oro no logra superar la marca psicológica.

Los analistas creen que la presión sobre el metal se debió ayer al tono agresivo de la Reserva Federal de EE.UU., que en un principio parecía más atractivo para los inversores.

Durante la reunión se hicieron declaraciones optimistas sobre la recuperación económica de Estados Unidos, el fortalecimiento del mercado laboral y la temporalidad de la inflación. Todos estos factores son indicios directos del inicio de la retirada de las medidas de estímulo.

- Los toros del oro esperaban que la Fed rebajara su tono debido a la activa propagación del coronavirus delta en el mundo, pero esto no ha ocurrido", comentó Brian Lundin, de Gold Newsletter.

En lugar de una pandemia esta vez, el regulador ha encontrado otra razón por la que aún no está preparado para empezar a endurecer la política monetaria. Según la Fed, la economía estadounidense aún no ha avanzado en todos sus objetivos. En primer lugar, es necesario el máximo empleo y la estabilización de los precios. Sólo cuando estos criterios se hayan cumplido podrán comenzar los recortes de estímulo.

Por su parte, los analistas consideran que el regulador estadounidense está desestimando prematuramente la tensa situación epidemiológica que sigue dificultando la recuperación económica en muchos países. En opinión de los expertos, el COVID-19 podría seguir interfiriendo en los planes de la Reserva Federal y obligarla a mantener un rumbo más suave durante mucho tiempo.

Sea como fuere, el regulador ha vuelto a aplazar la retirada de su política de estímulo por un periodo indefinido. Este fue el factor positivo en el que se centró el mercado del oro el jueves por la mañana, haciendo caso omiso de las notas de halcones en la retórica de la Fed.

Al final de la reunión se decidió mantener la tasa de interés básica y el volumen de compras de activos sin cambios. El dólar reaccionó a esto con una esperada caída. Por el contrario, el oro, que está inversamente correlacionado con él, comenzó a apreciarse.

Otro popular metal precioso también mostró una dinámica positiva esta mañana. La plata subió a 25,32 dólares. Ganó un 1,78% en comparación con el miércoles, cuando ganó un 0,9%.